Por Minghao Wu. Alumno del Máster.
La nutrición personalizada es un enfoque que se basa en información genética, fenotípica, médica y nutricional de cada individuo, para diseñar y proporcionar orientación dietética y nutricional específica. Este método no solo es aplicable a personas con necesidades nutricionales especiales (como madres lactantes, embarazadas o personas mayores), sino también a la población general saludable, para mejorar la salud pública en general. Además, la nutrición personalizada también ayuda a alcanzar objetivos específicos, como lograr el cuerpo deseado o enfrentar los desafíos del deporte competitivo. En la investigación de nutrición personalizada, el genotipo o las características fenotípicas suelen ser el foco de atención de los investigadores e interesados. La nutrición personalizada requiere una estrecha colaboración con los participantes, trabajando juntos para lograr cambios en el comportamiento y asumir una mayor responsabilidad en su salud.

Desde la perspectiva de los deportistas, las estrategias nutricionales tradicionales a menudo adoptan un enfoque de “un modelo para todos” que puede ser inadecuado. Es bien sabido que las diferencias genéticas afectan la absorción, el metabolismo, la ingesta, la utilización y la excreción de nutrientes y sustancias bioactivas presentes en los alimentos, lo que influye en numerosas vías metabólicas. La nutrigenómica y la nutrigenética emplean información del genoma y tecnologías de pruebas genéticas para investigar cómo las diferencias genéticas individuales influyen en la respuesta de los deportistas a los nutrientes y otros componentes alimenticios. Cada vez más investigaciones relacionan la interacción gen-dieta con biomarcadores del estado nutricional que afectan el rendimiento deportivo y el ejercicio. Hoy en día, los deportistas pueden implementar planes de nutrición personalizados basados en los resultados de las pruebas genéticas. La demanda de pruebas genéticas para lograr una nutrición personalizada y mejorar el rendimiento deportivo entre los deportistas y personas activas está en constante crecimiento.

Por ejemplo, la vitamina C puede reducir la producción de radicales libres inducidos por el ejercicio, pero la suplementación excesiva durante el entrenamiento de resistencia puede tener un efecto negativo en el rendimiento. La relación entre la vitamina C y el nivel de circulación de ácido ascórbico depende del genotipo GSTT1 del individuo, lo que permite personalizar la dieta. Mediante la prueba genética, se pueden identificar a los atletas que tienen un mayor riesgo de tener niveles bajos de vitamina C circulante, lo que puede aumentar el riesgo de altos niveles de ROS y disminuir la reparación muscular o del tejido conectivo, y así disminuir el rendimiento deportivo. Esta metodología ayuda a los atletas a usar los suplementos de manera más efectiva para mejorar su rendimiento.

Bibliografía:

Mullins, Veronica A., William Bresette, Laurel Johnstone, Brian Hallmark, and Floyd H. Chilton. “Genomics in Personalized Nutrition: Can You ‘Eat for Your Genes’?” Nutrients 12, no. 10 (October 13, 2020): 3118. https://doi.org/10.3390/nu12103118.

Guest, Nanci S., Justine Horne, Shelley M. Vanderhout, and Ahmed El-Sohemy. “Sport Nutrigenomics: Personalized Nutrition for Athletic Performance.” Frontiers in Nutrition 6 (2019): 8. https://doi.org/10.3389/fnut.2019.00008.

Interacciones con los lectores

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.