Una aportación importante a la literatura de Edgar Schein es la propuesta de Hatch. Ella añade la subjetividad de cada individuo al proceso de construcción cultural.  Dicha subjetividad indica la importancia de los significados, bien expresados en la simbología material, informal y formal, representacional o estética, comunicativas, u otras cualidades y características de las organizaciones, que inducen a reconocer una acción significatica por los símbolos que representa.Por ejemplo, en el caso de artefactos -tales como el lenguaje – la representación sibólica de las acciones de trabajo no representa simbólicamente lo mismo para un empleado, dirección de la organización o una persona usuaria de la misma.

La consecuencia de esta aportación es explicitar la pluralidad de significados que podemos observar en una organización. El mismo artefacto – por ejemplo, la realización de una prueba de examen en una Universidad-  es objeto de simbologías diferentes según quienes interactúen con esta acción: para estudiantes es un control de gran importancia, porque indica el progreso o no de sus estudios; para docentes es un recurso de autoridad en la conservación de la jerarquía del conocimiento; para la Administración de la institución es una herrramienta de legitimidad de las acreditaciones que expide a sus egresados.

También con otros valores supuestos, por ejemplo la  inclusión en las Universidades de estudiantes con minusvalías constituye un símbolo de justicia social para estudiantes que necesitan recursos de adaptabilidad; para gestores de la institución es un símbolo de igualdad y para otros estudiantes un reconocimiento de inclusión de lapoblación de estudiantes en las oportunidades académicas.  Y así sucesivamente.