Por José Carlos Chinchilla Pérez
En el idioma propio utilizado en la Pérfida de Albión, donde quizá se jactan de ser un idioma con menos diferencias sexistas, para la figura del director/a de orquesta solo tienen una palabra que es, ‘conductor’. Sin embargo, en un determinado contexto, para referirse a una directora de orquesta deben utilizar el adjetivo ‘female’ para diferenciar de género la profesión. ¿Acaso el propio término inglés lleva intrínseco que la profesión del director de orquesta recae en la figura de los hombres, dejando a un lado a las mujeres?
Por ofrecer alguna defensa, tenemos que advertir al lector/a que efectivamente, cuando se habla de director de orquesta se piensa automáticamente en hombre, pero no solo en Gran Bretaña ocurre este fenómeno, ya que es algo bastante común en el mundo de la música clásica. Por ofrecer algún dato, en 2017 la prestigiosa revista Gramophone publicó una lista con los 50 mejores directores del mundo y no aparecía ninguna mujer y, si buscamos en Google, de 50 resultados, solo 5 son mujeres.
Pese a existir un número ínfimo de mujeres directoras a lo largo de la Historia, alguna tuvo que ser la primera en dirigir una orquesta, y aunque es bastante difícil determinarlo con certeza, pudo haber sido Francisca Edwiges Neves Gonzaga, o no, pero en cualquier caso, creo que su historia es digna de ser mencionada. Conocida popularmente como Chiquinha Gonzaga, nació el 17 de octubre de 1847 en Río de Janeiro y falleció el 28 de febrero de 1935. Si bien es cierto que fue hija de nobles, resultó ser un poco rebelde puesto que se separó dos veces y luchó por su sueño de dedicarse a la música. En 1885 dirigía la orquesta del Teatro Príncipe Imperial, y ese mismo año estrenó una operetta A Corte na roça que le valió el sobrenombre de la ‘Offenbach femenina’ (que cada uno saque sus propias conclusiones sobre este sobrenombre). Además dirigió la banda de la policía militar, convirtiéndose así en la primera mujer directora de Brasil.
Su amistad con la primera dama de Brasil tuvo un papel importante en la lucha para acabar con la esclavitud (1888) y la proclamación de la República (1889).
Sin duda alguna, se trata de una vida que daría un buen argumento para una película, pero no ha sido así. La que sí se ha llevado al cine ha sido la historia de Antonia Brico, la primera mujer que dirigió la Filarmónica de Berlín en los años 30 del pasado siglo. La película La directora de orquesta de la holandesa Maria Peters. Obviaremos que no se trata de una gran película y que solo se centra en el mundo occidental además de caer en los típicos argumentos amorosos, pero hay varios detalles importantes como el protagonismo de la mujer y de manera colateral, nos muestra un cabaret que tiene como protagonistas a gente de la comunidad LGTBQ donde varios de los personajes son músicos con disforia de género.
Esta película es un ejemplo de cómo concienciar a la población sobre la problemática de la mujer para ser considerada una directora de orquesta. Una curiosidad de la película es que se estrenó el 25 de octubre de 2018, pero en España ha tardado casi un año en llegar a los cines y está disponible en unos cuantos de todo el territorio nacional.
Otro ejemplo para concienciar o paliar esta situación, es que en Francia ha visto la luz hace unos días un proyecto muy interesante para el año que viene, y se trata de un concurso de dirección en el cual solo pueden participar mujeres.
En España una oportunidad para ellas son las bandas de música de las que abundan en nuestro país, como por ejemplo, la directora de la banda municipal de Jaén, Juany Martínez-De la Hoz Casas.
Para acabar me gustaría mostrar una cita de una entrevista a esta directora realizada en 2015: “Te confieso que me aburre un poco que muchas veces se valore mi trabajo en clave de ser una mujer en un mundo masculinizado el de los directores, […] cuando la crítica debería orientarse únicamente en cómo ha salido un concierto, cómo se ha ejecutado una pieza o la elección del repertorio” Entrevista a Juany por el periódico Ideal de Jaén.
Tal y como dice la canción de los ‘Monty Python’, algunas cosas en la vida están mal y pueden volverte loco, pero siempre mira el lado positivo de la vida. Y de este modo intentemos ver el lado ‘female’ de la vida.
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