Por Jaime María Miralles Nevado

Vamos a escuchar algunas canciones: “Every breath you take” de The Police, “Run for your life” de los míticos Beatles o “La mataré” de Loquillo y los Trogloditas. AAnimo a todos los lectores a leer sus letras antes de leer el resto del artículo. Ahora, piensen: ¿han leído alguna vez titulares refiriéndose al new wave, el pop psicodélico o el hard rock como géneros musicales machistas? Desde luego, estoy seguro de que probablemente todos hemos leído o escuchado más de una vez algún titular (como este) en el que aparezcan juntas, aunque en distintas disposiciones sintácticas, las palabras “reggaeton” y “machismo”.

Como comenta el periodista musical Victor Lenore en este artículo, el reggaeton es un género nacido en barrios obreros de Panamá y Puerto Rico y es “una celebración del placer físico y sexual”. En este sentido, nos encontramos con un problema que comenta Lenore en el artículo: el puritanismo tradicional occidental, con lo que podemos creer como cierta una de las razones que la musicóloga Laura Viñuela achaca a que el reggaeton se perciba como machista: el racismo y el etnocentrismo, que nos llevan a calificar a una música nacida en otra cultura (en la que el sexo y la sensualidad se perciben de manera distinta) de machista solo por su explicitud respecto al sexo, cosifique o no cosifique a la mujer. De hecho, el grueso de la sociedad que ataca al reggaeton por estos aspectos parece no preocuparse de otros elementos patriarcales que escuchamos en canciones nacidas en nuestra cultura como, según Lenore, la normalización de los celos o la visión del amor como algo trágico y desesperado. Desde luego que el reggaeton es patriarcal, como lo son la mayoría de expresiones artísticas, pues el arte es un reflejo de la sociedad en la que vivimos, una sociedad patriarcal. Así, por las críticas que ha recibido el reggaeton desde sus inicios, probablemente haya quedado enquistada en nuestros cerebros la idea de que es un género que no podemos deconstruir ni mucho menos reconstruir desde el feminismo, ¿pero es esto así?

Si vamos a la lista de artistas más escuchados en 2018 en Spotify, nos encontramos en el octavo lugar el nombre de Bad Bunny, artista bandera del reggaeton y el trap latino, quien en obras como “Caro”, “Solo de mí” o “Bellaqueo” muestra su preocupación por cuestiones como la conciliación entre géneros, la violencia de género o la normatividad de los cuerpos. Podríamos hacer un trabajo extenso sobre la función que toma Bad Bunny, por su popularidad, dentro del asunto, pero es más conveniente que sepamos que hay muchas artistas mujeres del mundo de la música latina moderna que han elegido géneros como el reggaeton y afines tratando de no reproducir elementos de la cultura patriarcal, ya sea a través de mensajes políticos explícitos o no tan explícitos, como son la pionera Ivy Queen, que legó “Quiero bailar” como un himno del empoderamiento femenino; Ms Nina, Tomasa del Real o Chocolate Remix. En ese sentido, Tremenda Jauría son un colectivo madrileño de fusión de músicas latinas que defienden la capacidad política del reggaeton, además de que “el reggaeton de Maluma no es más machista que Alejandro Sanz o que Sara Montiel”.

Sobre los ataques al perreo, baile asociado al reggaeton, la periodista June Fernández, comenta que “es curioso porque, bajo una premisa aparentemente feminista, se niega la sexualidad y el placer de las mujeres”, ya que se da por hecho que la mujer “se frota” con el hombre para darle placer, renunciando a la posibilidad de que la mujer también sienta placer con ello. Es en este lugar en el que está uno de los principales puntos importantes de tratar este tema, como dice June Fernández, muchas veces se ataca al reggaeton por machista desde una perspectiva totalmente patriarcal y machista, por paradójico que parezca. Además, quiero reparar sobre lo potencialmente empoderante que es un género musical cuya relación con el baile y, por tanto, el cuerpo, es tan importante.

Porque seres sexuales, con derecho a perrear, somos todos – Teresa Vaquerizo

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Comentarios

  1. Estoy un poco confuso. ¿El reggaeton no es machista porque hay otros estilos que tienen algunas canciones que lo son? ¿Y si se critica el reggaeton porque en el fondo viene de otra cultura, donde están las críticas a la salsa, al bolero, al merengue y al cha-cha-chá?

  2. el reaggeton no es machista? ja ja ja,es lejos la ” musica” que mas denigra a la mujer,pero porque no dicen nada las feministas del reaggeton? simple $$$$$$$$$$$$$$$$$$$$ donde hay dinero se callan la boca,su ” lucha” “sororidad” es selectiva,

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