Es el grito de guerra de la mente colmena de las adolescentes, oliendo la carne joven

Por Sofía Franco Oñate

Fuente: Hudson, P. (23/08/2013) One Direction Fans are Probably some of the sanest people in the world. The Mirror https://www.mirror.co.uk/3am/celebrity-news/one-direction-fans-probably-sanest-2207784

El título es un extracto de un artículo de The Guardian (Empire, 2015), una crítica de un concierto de One Direction en el Bournemouth International Centre. Esta frase sirve para describir la reacción de las fans a la aparición de la banda en el escenario.

No se trata de una excepción en la crítica de este tipo de bandas. Desde Kids on the Block, la tradición crítica de las esferas del rock ha trasladado todo tipo de prejuicios y valores estéticos, extraídos directamente del Modernismo, al periodismo musical de los géneros populares urbanos (Coates, 2003). A esto le añadimos unos términos muy característicos empleados en la crítica a las boy bands, que han permanecido estancos desde las primeras críticas de The Beatles (Duffet, 2012). Uno de los elementos más repetidos en las críticas es el extraordinario comportamiento de las fans, además de un lenguaje notoriamente condescendiente hacia las seguidoras de estas bandas. Se caracterizan con el término teenybopper, definido como una joven que consume las novedades estilísticas perpetuamente (Wald, 2002).

Los estereotipos de género asociados con las comunidades fanáticas femeninas radican en una identificación de la mujer con la cultura de masas (Huyssen, 1986) y la consecuente desconsideración de ambos. Esta identificación actúa en dos sentidos:

1. Para las seguidoras, que son consideradas desde un punto de vista paternalista como una comunidad engañada por el proceso industrial.
2. Para los grupos, que son criticados constantemente en términos de inautenticidad, vanidad, superficialidad e inconsistencia (los mismos que asume en sus comportamientos sociales la teenybopper).

Las particularidades que asume la audiencia femenina joven desde la génesis de las boy bands con The Beatles se han explicado desde la academia por un componente psicosexual. La fórmula de la boy band ofrece diferentes versiones de la masculinidad, todas ellas con rasgos deseables y en un comportamiento romántico-afectivo (Abate, 2017). Esto les da la oportunidad a  adolescentes y mujeres jóvenes de crear alternativas subversivas de la masculinidad (Ehrenreich, 1991; en Duffet, 2012), además de la experimentación romántico-sexual en un espacio seguro. Hay un ejemplo muy ilustrativo de cómo la prensa musical ha estado muy cerca de descubrir esta dimensión del fenómeno fanático, en un tono bastante irónico:

El afecto abierto y genuino que muestran los miembros de One Direction entre ellos existe en una burbuja independiente de un mundo que puede estar lleno de masculinidad tóxica y hostil que amenaza los espacios dominados por las mujeres. En un concierto de One Direction, sin embargo, las chicas se sienten tan seguras como para chillar juntas cuando Horan hace su característico casi-”mejor que las palabras”-agarrón de entrepierna […].

(Steiner, 2015)

El caso de One Direction es quizás el más paradigmático en el estancamiento de la crítica, por ser el último de una línea de boy bands anglosajonas con gran éxito internacional; y por tener uno de los fandoms más acusados de comportamientos obsesivos. Por poner algunos ejemplos:

[…] la boy band británica ha creado una fan base ridículamente apasionada y ruidosa en los últimos tres años.

(S. A., 2012)

La plaza era un campo de batalla de sacos de dormir, y las Directioners emocionadas estaban guardando sus puestos en las barricadas.

(Sullivan, 2013)

[…] horas después sólo quedan los chillidos (ni las armonías de tres partes ni las florituras) resonando en mis oídos.

(Hunt, 2015)

Este reduccionismo de las experiencias y comunidades femeninas, además de la desacreditación de las mujeres como agentes de negociación de la industria cultural, acaba viéndose reflejado en los más condescendientes y deshumanizantes relatos. Este retrato de la audiencia femenina joven ha invisibilizado otras muchas facetas y matices sobre el comportamiento fanático, sus características y cómo la mujer puede ostentar agencia en la industria musical; y ha servido para legitimar los géneros musicales de dominación masculina en términos opuestos: auténticos, no comerciales, permanentes y estéticamente trascendentes.

Bibliografía

Abate, M. A. (2017). ” Soda attracted girls like honey draws flies”: The Outsiders, the Boy Band Formula, and Adolescent Sexuality. Children’s Literature Association Quarterly, 42(1), 43-64.

Coates, N. (2003). Teenyboppers, groupies, and other grotesques: Girls and women and rock culture in the 1960s and early 1970s. Journal of Popular Music Studies, 15(1), 65-94.

Duffett, M. (2012). Multiple damnations: deconstructing the critical response to boy band phenomena. Popular music history, 7(2).

Huyssen, A. (1986). “Mass Culture as Woman: Modernism’s Other.” After the Great Divide: Modernism, Mass Culture, Postmodernism. Bloomington, Indiana: Indiana University Press.

Wald, G. (2002). ‘I Want It That Way’: Teenybopper Music and the Girling of Boy Bands. Genders, 35, 1-39.

Para ampliar

Coleman, R., & Lyons, A. (2023). Stereotypes in media representations of boy bands and their fans. Journalism, 14648849231183812.

Ehrenreich, B. et al. (1992). ‘Beatlemania: Girls Just Wanna Have Fun’. In The Adoring Audience, ed. Lisa Lewis, 84-106. London. Routledge.

Hemerografía

Empire, K. (08/02/2012). One Direction-review. The Guardian. https://www.theguardian.com/music/2012/jan/08/one-direction-x-factor-live

Hunt, E. (09/02/2015). One Direction review – five unpolished lads with puppy-like enthusiasm. The Guardian. https://www.theguardian.com/music/2015/feb/09/one-direction-on-the-road-again-tour-review-sydney

S.A. (2012). Concert review: One Direction in Auckland. NZ Herald. https://www.nzherald.co.nz/entertainment/concert-review-one-direction-in-auckland/Q463ORL7H2A5BT5VR47BBHGRBE/

Steiner, A. M. (06/08/2015). One Direction concert review at MetLife Stadium: Maybe they’re fireproof. Entertainment Weekly. https://ew.com/article/2015/08/06/one-direction-concert-review-metlife-stadium/

Sullivan, C. (20/08/2013) One Direction fans queue for prime view of a global success story. The Guardian. https://www.theguardian.com/music/2013/aug/20/one-direction-fans-film-premiere