Y ya con este último post, termino la lista con mis libros favoritos de narrativa contemporánea. No he podido incluir todos, soy consciente de que me dejo muchos y muy buenos libros en el tintero, pero los que he señalado son los que me parecen los mejores, son los que más me han impactado y los que, indudablemente, recomiendo leer.
Últimas tardes con Teresa, de Juna Marsé
Ambientada en una Barcelona de ricos burgueses y clases marginadas, relata la amistad entre una joven universitaria, burguesa y falsamente rebelde, y un seductor ladrón de motos, que se hace pasar por obrero militante revolucionario. La obra fue llevada al cine en 1984 por Gonzalo Herralde.
La casa de los espíritus, de Isabel Allende.
La historia relata la vida de la familia Trueba a lo largo de cuatro generaciones y sigue los movimientos sociales y políticos del período poscolonial de Chile. Calificada dentro del realismo mágico, la novela incorpora cosas inverosímiles y extrañas a lo ordinario. Narrada desde la perspectiva de dos de sus protagonistas, los acontecimientos retratados en ella tratan sobre el amor, la familia, la muerte, los fantasmas, las clases sociales, la revolución, la política, los ideales y lo maravilloso.
Ha sido llevada al cine con el mismo nombre por Bille August en 1993, la protagonizan Jeremy Irons, Meryl Streep, Glenn Close, Winona Ryder y Antonio Banderas
Relatos, de Alice Munro
Afirmar que la rutina, la cotidianidad, la normalidad casi tediosa de unas vidas pueden tener algún interés es algo que sin duda nos podrá sonar paradójico. La maestría de Alice Munro consiste precisamente en eso: en hacernos sentir que una vida cualquiera puede ser transformada, por mediación de la literatura, en una pequeña obra de arte.
Niebla, de Miguel de Unamuno
Como sugiere el título Niebla, esta obra borra la línea entre la realidad y la ficción. Unamuno se mete dentro de la ficción y el protagonista descubre que es sólo un ente de ficción. La novela está formada por treinta y tres capítulos estructurados según un núcleo central y un desenlace. Los temas que trata son la inadecuación del ser humano, la igualdad de la mujer y la metaficción.
Primera memoria, de Ana María Matute
Matute es la tercera mujer que recibió el Premio Cervantes, obtenido en 2010 y una de las voces más personales de la literatura española del siglo XX. Muchos críticos consideran que su mejor obra es la trilogía Los Mercaderes, la cual está conformada por Primera memoria, Los soldados lloran de noche y La trampa. Sobre su obra se dice que «aunque los argumentos de cada una de sus novelas son independientes, las une el tema general de la Guerra Civil y el retrato de una sociedad dominada por el materialismo y el interés propio».
La violencia, el odio, la muerte, la miseria, la angustia y la extrema pobreza que siguieron a la guerra marcaron hondamente a su persona y a su narrativa. La de Matute es la infancia robada por el trauma de la guerra y las consecuencias psicológicas del conflicto y la posguerra en la mentalidad de una niña, y una juventud marcada por la Guerra
La peste, de Albert Camus
Cuenta la historia de unos doctores que descubren el sentido de la solidaridad en su labor humanitaria en la ciudad argelina de Orán, mientras esta es azotada por una plaga. Se piensa que la obra está basada en la epidemia de cólera que sufrió la misma ciudad de Orán durante 1849 tras la colonización francesa, a pesar de estar ambientada en el siglo XX.
La peste muestra cómo el hombre se enfrenta al absurdo, noción filosófica cuya teoría el propio autor contribuye con esta misma novela a definir. La novela conlleva una reflexión de tipo filosófica: el sentido de la existencia cuando se carece de Dios y de una moral universal. Esta ausencia de sentido supremo es el “absurdo”, y es algo que aunque desconcertante es potencialmente positivo, puesto que las nuevas razones de la existencia serían cualquiera que vaya ligado a valorar la vida humana por sí misma y no por causas superiores a las personas (religiosas, ideológicas, etc.). La obra muestra este sentido de la existencia, libre y ateo, manifestado principalmente en el apoyo mutuo y en la libertad individual, enemistadas estas con la indiferencia y la autoridad.
El extranjero, de Albert Camus
Es la primera novela del escritor francés. El protagonista, el señor Meursault, comete un absurdo crimen y, a pesar de sentirse inocente, jamás se manifestará contra su ajusticiamiento ni mostrará sentimiento alguno de injusticia, arrepentimiento o lástima. La pasividad y el escepticismo frente a todo y todos recorre el comportamiento del protagonista: un sentido aburrido de la existencia y aún de la propia muerte. El personaje es un ser indiferente a la realidad por resultarle absurda e inabordable. El progreso tecnológico le ha privado de la participación en las decisiones colectivas y le ha convertido en “extranjero” dentro de lo que debería ser su propio entorno.
Galíndez, de Manuel Vázquez Montalbán
La obra nos cuenta un episodio real, dramático y oscuro: el secuestro, tortura y asesinato en 1956 de Jesús de Galíndez, representante del Gobierno vasco en el exilio ante el Departamento de Estado estadounidense.
Quizás nos lleve el viento al infinito, de Gonzalo Torrente Ballester
Este libro es una parodia de la novela de espías, una versión del personaje múltiple y de los mitos de su tiempo: en el Berlín de la guerra fría las grandes potencias se ven superadas por las acciones del Maestro, una especie de agente doble cuya tarea es ordenar el caos que domina ese tiempo. El espía, como no podía ser de otra manera, se enamora de Irina Tchernova, una agente soviética, quien tampoco es lo que parece.
La capacidad fabuladora de Torrente alza el vuelo para cuestionar temas como la libertad del individuo, la humanización de los robots, el progreso del conocimiento científico, la política de bloques y el poder de los Estados. Inspirada tanto en el mundo de la novela como en el del cine de los años veinte.
Veinticuatro horas en la vida de una mujer, de Stefan Zweig
Los hechos narrados en la historia transcurren diez años antes de la Primera Guerra Mundial. Es una novela de corte psicológico, que trata el tema de la voluntad y sus flaquezas, del temor a ser dominado por la inmediatez y la fuerza de pasiones desconocidas que puedan anular el control de la voluntad. También se podría considerar una novela de amores tortuosos, prohibidos y dañinos.
Juegos de la edad tardía, de Luis Landero
Los anhelos de una vida amorosa e intelectual inquieta que Gregorio alimentó en su juventud se habían esfumado cuando, convertido ya en un oficinista gris, conoce un día por teléfono a Gil, hombre modesto, maduro también, quien, tras largos años de exilio, acabó idealizándolo todo en mitos anacrónicos. Gil necesita a toda costa a un héroe-artista al que adherirse y, lentamente, consigue resucitar en Gregorio sus sueños juveniles y el deseo de convertirse en esa figura simbólica. Y ha lugar la metamorfosis de Gregorio en Faroni, personaje que ninguno de los dos nunca logró ser -ingeniero y poeta, trinfador, culto, políglota, apuesto, audaz en el amor, «progre»-, pero patética caricatura del artista trasnochado.
Las palmeras salvajes, de William Faulkner
Su título original fue: Si Yo de Ti me olvidara Jerusalén, un verso del salmo 137 de la Biblia. Libro favorito de Faulkner. La traducción en español de este libro la realizó Borges, haciendo una versión libre de la obra y cambiando el título.
La ciudad de los prodigios, de Eduardo Mendoza
Un retrato vivo de la evolución de la ciudad de Barcelona entre las exposiciones universales de 1888 y 1929. Una transcripción de la memoria colectiva de una generación de barceloneses.
El hilo conductor de toda la trama es Onofre Bouvila, representante del ideario colectivo de las clases sociales más bajas. Es un joven de origen humilde que, gracias a sus propios esfuerzos, se convierte en uno de los hombres más ricos e influyentes no sólo de Cataluña sino de toda España: un personaje sórdido y cruel, sin escrúpulos, que atesora poder y bienes gracias a sus maniobras inteligentes pero también salvajes.
La isla inaudita, de Eduardo Mendoza
En una Venecia insólita, a la vez cotidiana e irreal, el prófugo viajero se sustrae a las férreas y sórdidas leyes de su rutina barcelonesa para ingresar en un paréntesis que de provisional parece llamado a convertirse en indefinido: una vida regida quizá por otra lógica secreta, hecha de encuentros casuales, de sucesos imprevistos, de relatos y leyendas de tradición oral y mitos lacustres.
Ilona llega con la lluvia, de Álvaro Mutis
Una novela de amor, de amistad y de fenómenos extraños. El personaje protagonista de la obra, Maqrol el Gaviero, va a bordo del Hansa Stens, con rumbo a Panamá; pero la nave es objeto de secuestro por sus acreedores, y el marinero se ve obligado a abandonar los ritos y las ceremonias del mar.
La fuente de la edad, de Luis Mateo Díez
La novela y el cuento son los dos géneros que forman el grueso de la actividad literaria de Luis Mateo Díez. Su universo narrativo ha ido evolucionando desde un realismo convencional y exterior hacia lo que el mismo autor ha definido como “realismo metafórico”. La acción de la novela, transcurre en los tiempos del franquismo, durante los que transcurre la acción de la novela, regidos por la cofabulación entre la Iglesia (huestes del hisopo) y los políticos del régimen de Franco, conocido como movimiento nacionalista.
Sostiene Pereira, de Antonio Tabucchi
La novela está ambientada en la ciudad de Lisboa en 1938, en pleno régimen salazarista. Pereira es un periodista que ha abandonado la crónica negra para dirigir la sección cultural de un periódico de la ciudad, el Lisboa. El ritmo es inicialmente muy lento, hecho de introspecciones, para después acelerarse al mismo ritmo que aumenta la turbación del protagonista.